DONDE RECIBE EL NOMBRE ROCINANTE (por quien fuera más tarde Don Quijote)

Publicado 2016-10-16

DONDE RECIBE EL NOMBRE ROCINANTE

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DONDE RECIBE EL NOMBRE ROCINANTE

(por quien fuera más tarde Don Quijote)

 

Listas las armas, no hubo caballero

—si Alejandro o El Cid— que a su aventura

no hallase en proporción: cabalgadura,

nobleza del jinete y escudero.

Al tiempo de mentarnos, sea primero

nominado el corcel que, por ventura,

venga a ser en cien lides mi montura

con nombre alto y sonoro, considero.

Por tal bautismo ganará la raza

de este caballo basto y mala traza

al brillar bajo el palio de la gloria.

Digo, así, que se llame, en adelante,

a quien fue rocín antes: Rocinante.

Y registrado quede por la Historia.

 

GENIO Y FIGURA DEL ASNO DE SANCHO

 

No soy burro por falto de talento,

—que el nombre no da fe de mi valía—

y brindo en toda hazaña mi armonía

de correr por el campo, harto contento.

Téngase por verdad que no hay jumento

o asno manchego con la fama mía,

teniendo a Sancho Panza de amo y guía

y en trance escuderil grave argumento.

Mas, vengo a rebuznar que se me nota

la dura brega de ir sobre mi lomo

las alforjas y el dueño con su bota.

Y en ver a mi señor de gobernante,

cabalgando a la Ínsula, hoy, ni como;

bien nutrido estaré más adelante.

(Aviven don Quijote y Rocinante

su trote a Barataria y, de seguido,

reciba el escudero lo ofrecido)

 

AL CIPRÉS DE LA CASA DE CERVANTES

 

Más que ciprés vecino y más que nada,

—de ser tan vertical su compañía—

pluma, que a la espadaña desafía

con la paz en la punta enarbolada.

Algo más que ciprés, deletreada

espuma vegetal de poesía

y árbol de enamorada geometría,

de estar en flor la eternidad plantada.

O, celoso guardián, viejo testigo

con su perfil de encandilado amigo

alzado en el umbral de la memoria.

Siempre ciprés de luces abonado

que al pie, Cervantes, queda empadronado

y es tierra alcalaína, casa y gloria.

 

 

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